Thursday, February 28, 2013

Ostras vivas o cucarachas fritas: Antropología de la alimentación.

Los animales y vegetales que consumimos son auténticos "mutantes", y la agricultura y ganadería se alejan cada vez más de la naturaleza para acercarse al laboratorio y a la industria..” 

"Los nuevos hábitos alimentarios se basan más en el marketing que en prácticas tradicionales o nutricionales" Jesús Contreras, antropólogo.



De libro: "Antropología de la alimentación" Jesús Contreras.

La comida no es y nunca ha sido una mera actividad biológica. Comer es un fenómeno social y cultural, mientras que la nutrición es un asunto fisiológico y de la salud. Por ejemplo, la comida rápida es un tipo de comida que debe ser considerado dentro del contexto de una experiencia social que incluye música, ruido y compañía. Sólo cuando los "bares de ensaladas" lleguen a ser lugares "de moda" para reunirse, cabrá esperar cambios más o menos drásticos en los hábito alimentarios de los adolescentes.

También se ha dado el caso de personas que han muerto de hambre por negarse a comer alimentos catalogados no comestibles para su cultura, y ésta es una característica esencialmente humana. ¿Cuántos europeos completamente hambrientos aceptarían, por ejemplo, ingerir lo que los tuareg consideran un manjar: ojos de cordero?

La variedad de sustancias que son consumidas como alimentos por los diferentes pueblos del mundo es extraordinaria, y van desde la termita hasta la ballena. Nos diferenciamos de otros animales en que estamos preparados para un régimen con gran variedad de alimentos. Nuestro equipo dental incluye los incisivos cortantes de los roedores, molares trituradores de herbívoros,  y los caninos puntiagudos de los carnívoros. Además de un intestino extremadamente largo para las legumbres y jugos gástricos y pancreático para adaptarse a una gran variedad de condiciones. Lo malo es que el hombre no puede conseguir todos los nutrientes para sobrevivir si no es a partir de un amplísimo abanico de alimentos. A pesar de ellos, hay sociedades que se han adaptado a ser carnívoras, como los inuit, aunque no se ha encontrado ninguna población enteramente vegetariana.

Los pueblos occidentales muestran repugnancia frente a la idea de comer insectos, pero no vacilamos en degustar caracoles y ostras vivas, al igual que los chinos de la provincia de Hunan que comen gambas cuando todavía pernean.
En las carnicerías madrileñas se venden criadillas, es decir, los testículos,a veces se pueden comprar los testículos de los toros bravos que acaban de ser lidiados en una corrida.
 También encontramos poblaciones asiáticas que prefieren consumir alimentos putrefactos. Los inuit comen grandes cantidades de carne cruda para conservar su valor nutritivo, lo que compensa la falta de alimentos vegetales y evitan el escorbuto. También gustan de la carne pasada, ya que la bacteria que la provoca produce vitamina B1 y otras. El Kiviak o kiviaq es un platillo tradicional invernal de los inuit de Groenlandia que consiste en mérgulos marinos envueltos en piel y grasa de focaque se habían dejado pudrid durante meses. Nosotros, en cambio, cuando hervimos los vegetales, añadimos bicarbonato a las legumbres o pelamos las patatas antes de hervirlas, disminuimos sus vitaminas y nutrientes. Y tampoco nos falta los productos putrefactos, ecasu marzu es un queso típico de Cerdeña, Italia, conocido por estar infestado de larvas vivas de insectos. Casu marzu significa “queso podrido” en un dialecto del sardo. Los catalogados como quesos azules (Cabrales, Roquefort...) tienen este característico color por el moho

Otros platos deliciosos pueden ser los fetos de roedor, feto de pato, lenguas de alondras, ojos de cordero, desove de anguilas, tarántulas fritas, grillos, escorpiones, cucarachas, hormigas, sesos de mono, sesos de cordero, el contenido del estómago de las ballenas y la traquearteria del cerdo... El haggis escocés se trata de cocer en el estómago de un cordero pulmones de vaca con sus intestinos, su páncreas, su hígado y su corazón, condimentado con cebolla, grasa de riñones de buey y gachas de avena. El foie gras es un producto alimenticio hecho del hígado hipertrofiado de un pato o ganso que ha sido especialmente sobrealimentado por sonda (alimentación forzada con maíz) estando vivo. La sangre es también una de las prohibiciones más extendidas, aunque no de manera universal, pues es un alimento fundamental para pastores centroafricanos nómadas, ya que es muy nutritiva. Aunque en la religión católica está prohibida, son famosas la sangre de cerdo en las morcillas.

Aún así, los factores hereditarios también nos dictamina los alimentos. Un buen ejemplo es el de la tolerancia a la lactosa (la leche) tiene que ver con factores genético. Por ejemplo, los americanos blancos y los daneses, finlandeses, húngaros, tusi y fulani nómadas son descendientes de pueblos que vivieron en áreas "lecheras" y han mutado durante 10.000 años para tolerar la lactosa, al contrario que los americanos negros, los aborígenes australianos, los inuit de Groenlandia, los thai, los bantú, los indios pima... Los chinos y otros habitantes de países del Asia Oriental, muestran su aversión llamándola "sangre blanca". Los griegos de los tiempos heróicos remarcaban la barbarie de los otros pueblos a través de su predilección por la leche.  En realidad, los "desviados" son los tolerantes, que son la minoría. 
Teniendo en cuenta este dato, conviene reflexionar sobre las campañas de ayuda a pueblos hambrientos, pero intolerantes a la lactosa, que consiste en leche en polvo que producía vómitos y diarreas en los niños. Sin contar con el agua donde se mezcla esa leche, en algunas zonas un recurso muy difícil de conseguir o contaminada, o que no hay recursos con los que calentar la leche, etc etc. El caso es que a estas multinacionales realmente les interesa más la dependencia a sus productos que la "ayuda humanitaria". Un ejemplo es NESTLÉ. 
En contraste con la larga historia de la lactosa, está la sucrosa de la caña de azúcar, relativamente nueva y muy reciente para los inuit y otras indígenas americanas, que ya sufren de diarreas persistentes, gastroentiritis y diabetes.

El gusto azucarado es una característica adaptativa positiva, ya que es una fuente de energía alta, una fuente de calorías rápida. Por eso, en numerosas culturas, esos alimentos dulces se consumen al final de las comidas, incluso una vez hartos, se dispone de un "agujero" para el postre. Pero es curioso que desde 1900, su consumo mundial se ha decuplicado, y ahora asistimos a un desajuste a la apetencia del azúcar y las capacidades metabólicas. Esto, y el sedentarismo, conduce a un peso excesivo y a la obesidad, enfermedades cardiovasculares, diabetes e hipertensión.

En cuanto al sabor amargo, es decisivo ya que la mayoría de los venenos naturales poseen este sabor. Quizás por eso, los niños aguantan menos este sabor, mientras que con la edad vamos tolerándolo mejor, al igual que muchas de las verduras que la contienen (brócoli, coliflor, col de Bruselas...)
Entre los productos más solicitados se encuentran los que a primeras resultan desagradables, como la pimienta negra, el picante, el jengibre, el café y el alcohol. Curiosamente, el picante tiene gran éxito sobre todo en aquellos lugares calurosos... El caso es que el pimiento picante es una gran fuente de vitamina A, C y B, por lo que es una buena ayuda para las sociedades tropicales y subtropicales en las que los aportes vitamínicos procedentes de otras fuentes son muy marginales. Además, disminuyen la temperatura corporal, aumentan las secreciones gástricas y estimulan el apetito, y limitan la multiplicación de las bacterias en el organismo.

El modo en que los japoneses insisten en el aspecto estético no es una mala adaptación, sino todo lo contrario. Faltando a la vez alimentos en abundancia y combustibles para prepararlos, los japoneses se adaptaron a su alimentación y su preparación a la pobreza de sus recursos. Lo mismo ocurrió en China: cuando la población estaba en aumento y las calamidades naturales traían hambrunas, todo alimento potencial era probado, incluyendo ratas ("gamos domésticos"), serpientes ("anguilas de los matorrales") o saltamontes ("gambas de los matorrales")
En Japón, las pequeñas cantidades de alimentos (pescado y carne sobre todo) que podían conseguir se cortaban en trozos finos y pequeños que se servían en minúsculas porciones, después de haber condimentado con especias diversas para variar el gusto. Este método economiza el combustible, pues la finura de los pedazos permite cocerlos en muy poco tiempo a alta temperatura. Algunos platos no requieren de ningún combustible ya que se sirven crudos. Los utensilios de cocina tipo "wok" chino, transmiten el calor inmediatamente y contribuyen también a la economía del combustible. Además, el utilizar los mismo alimentos de manera variada y contrastada, en platos que pueden ser dulces o amagos, crudos o cocidos, fríos o calientes, crujientes o untuosos, y presentado en numerosos refinamientos estéticos agradables a la vista aumentan la impresión de diversidad. Quizás por eso tenga tanto éxito esta cocina asiática en nuestra sociedad. Sin contar con que, antes de la moda de estos restaurantes, ya nos apropiamos de sus pastas, que al contrario de lo que podamos pensar, su origen no es la cocina italiana sino la cocina china.

Curiosa es también la predilección de los países occidentales por los cereales, anteponiéndose a la patata y aún sabiendo que un campo de 0.40 hectáreas de este tubérculo podía alimentar a una familia numerosa durante todo un año. Esto no era sólo por prejuicios, sino también por razones políticas. Los cereales sólo fructifican al año siguiente de su siembra, se reproducen por semillas y se multiplican por granos. Sin embargo, la mayor parte de los feculantes tropicales son perennes que viven durante varios años, se multiplican fácilmente por retoños o esquejes y se recoletan fácilmente los frutos, hojas o incluso raíces... Cabe preguntarse si las diferentes formas de tributo y diezmo de la Europa medieval hubieran sido posibles con este tipo de cultivos. Hoy, habría que añadir a Monsanto y sus semillas transgénicas en esta misma lógica.

Los animales y vegetales que consumimos son auténticos "mutantes", y la agricultura y ganadería se alejan cada vez más de la naturaleza para acercarse al laboratorio y a la industria. También se reducen las variedades dando lugar a campos monotemáticos, grandes sistemas de producción agroalimentaria de escala internacional. Ya casi es un mito el que los propios campesinos produzcan la mayor parte de los alimentos que consumen. Y es una paradoja que ésto provoque una nostalgia a los modos de comer y los platos que han ido desapareciendo, expandiéndose el mercado de los productos naturales o ecológicos y los productos del país.


"—¿Todos los días viene a la milpa?, le preguntamos.
—Sí; si todos los días como. ¿Y usted va a leñar?- nos preguntó en su lengua materna.
—Sí, en un tiempo fuimos a leñar, pero ahora tenemos otro trabajo- respondimos.
—Es una vergüenza que no trabajes lo que comes- dijo.

Es don José Isabel Tuz, hombre maya de 91 años, quien después de desyerbar en su milpa regresa a su casa que se encuentra a 6 kilómetros de distancia.
Cuando intentamos ayudarlo, don José nos rechazó cortésmente mientras nos indicaba dónde debíamos caminar para salir de la milpa."

(Foto y texto de José Luis Quintal Catzín)


Friday, February 22, 2013

Los zombies y la muerte vudú: cultos antiyupi.

""La palabra zombie significa "dar en prenda o empeñar" Convertirse en peones o prendas para que unos pocos pudieran obtener riqueza". 
Edwin Ardener, antropólogo.

"Los zombies suelen ponerse de moda en tiempos de crisis. Es lo que tememos nosotros de las crisis, el perder nuestra identidad"
Manel Loureiro, escritor.
 
En La rama dorada, el antropólogo escocés James G. Frazer contaba esta historia: un jefe neozelandés dejó sobras de su almuerzo en un camino y un esclavo comenzó a comérselas. Antes de acabar, alguien le informó de quién eran y, presa de pánico, el hombre murió con convulsiones al anochecer.

La muerte vudú es lo contrario al placebo. Se trata de mecanismos psico-sociológicos para conseguir la muerte por conjuro.

En "la muerte vudú" (1942) Walter B. Canon, fisiólogo estadounidense, estudió el proceso del embrujo y su naturaleza psicofisiológica. Tienen que darse para ello dos condiciones: que el sujeto lo sepa y que lo sepa la comunidad que le rodea. La fe ciega en el poder del hechicero provoca en el embrujado un sentimiento agónico de ansiedad, que es de continuo reforzado por el resto de los habitantes, los cuales evitan al condenado como si ya estuviese muerto (al igual que el ostracismo griego). El embrujado se queda a solas con su agonía, pensando que se muere sin remedio por estar sometido al conjuro. Esta creencia desencadena una gran crisis de ansiedad que produce alteraciones viscerales en el sujeto en cuestión.

Si a esto le añadimos el profundo rechazo social al que el embrujado está siendo sometido y lo reforzamos con las historias de horror que ha oído contar desde niño, el resultado es una grave disminución del volumen sanguíneo, caída brusca de la presión arterial debida a la permeabilización de los capilares y deshidratación. Es resultado es que toda esta sintomatología termina por provocar una alteración homeostática mortal, una muerte sin lesión, debida al miedo.

Es lo que Levi Strauss llamó shock sociocultural: "la integridad física no puede soportar la disolución del ser social"

A veces, no es necesario la eliminación total de la persona, sólo su alma.

"Parece que los zombies son reales. Realmente existen."escribe el antropólogo Nigel Barley en su libro "Bailando sobre la tumba". 
"Un etnobiólogo, Wade Davis, ha conocido a algunos. Poseemos una fotografía de un zombie, sentado tan ricamente sobre su propia tumba, con los brazos cruzados en un gesto de aparente resignación. James Bond y cientos de novelistas de terror han implantado en nuestras mentes una iconografía más salvaje: calaveras sonrientes, obscenos ritos de medianoche, los andares torpes y los ojos vidriosos del cadáver homicida con los brazos abiertos para estrangular. Sin embargo, en el relato de Davis, la sociedad secreta Bizango, el principal culto vudú, termina pareciéndose bastante a una rama del Rotary Club, con su hincapié en los valores del grupo y la familiatradicional.
La zombificación se logra pocas veces y conlleva la administración de la ortodoxina, el veneno del pez globo japonés, para simular la muerte de la víctima. Tras el entierro, los maestros vudú sacan de la tumba al zombie, consciente pero paralizado, y le condenan a una vida de esclavitud drogodependiente en un país saturado de mano de obra barata.

Lo asombroso de las zombificaciones de Haití es lo poco que se parecen a las creencias africanas sobre los zombies."

Loshaitianos (una sociedad que consiguió la libertad por una rebelión de esclavos) reducen a la esclavitud al egoísta que goza de un éxito notable a expensas de sus parientes.

Edwin Ardener, que estudió a los bakweri (África) en Camerún (un país donde no resulta extraño que los líderes vendan a sus seguidores) demostró que a estos egoístas, al contrario que en Haiti, no se les condena a al esclavitud sino que se les acusa de ser amos de zombies. Creen que lo que hacen es zombificar a su parentela, enviándolos a trabajar en minas y fábricas en las montañas. Sus jornales van a parar a sus amos.

En ambos casos, son lo que podíamos llamar "cultos antiyupi" "En ambos casos, la excesiva riqueza individual, el pecado del salario, puede acarrear al muerte."

Ligado a esta idea, el mismo Edwin Ardener, en 1963 escribe:

"La palabra zombie significa "dar en prenda o empeñar". Así, en las nuevas condiciones de una economía de plantación, se creía que los parientes se convertían en peones o prendas para que unos pocos podrían obtener riqueza". 
"Se corrió el rumor de que los ancianos habían ordenado que el dinero no debía ser recogido del suelo, ya que estaba dispersa como un señuelo para atraer a los hombres a la orilla del agua. Allí, los "franceses" los usarían para obligarles a trabajar como zombies en un nuevo puerto de aguas profundas, o utilizarlos para apaciguar a los espíritus del agua. Desde hace algunos meses era común ver las monedas y hasta billetes de bajo valor sobre las calles de la capital." 
En su estudio de la brujería djambe del Maka, Peter Geschiere describe la aparición de un nuevo tipo de hechicería que les transforman en una especie de zombi y les ponen a trabajar en "plantaciones invisibles". 
Añade que "las narrativas sobre djambe son sorprendentemente similares a los temas capitalistas. "Hablan de las brujas como empresarios que están siempre en alerta y listos para apropiarse de nuevas riquezas y poderes. " "Los brujos africanos son convertidos en la personificación de los productos caprichosos, las sirenas de los deseos egoístas." La gente habla indistintamente de mágicas "brujas" y los ricos "grandes hombres" que "comen" las almas de la gente:
La consumición de almas se cree que está impulsada por un apetito por el dinero, un hambre desatada por el colonialismo europeo.

Estas narrativas recuerdan a muchos los cultos cargo y su necesidad de explicar las razones de todos estos bienes y las desigualdades sociales que acarrea. De hecho, Gerchiere comenta la anécdota de una mujer que confesó a su pastor que los aviones pertenecen al mundo de la brujería y cuando los blancos se la arrebatan a los negros, éstos los trasladan al mundo real.

Josep Martí, antropólogo, apostilla:  "No es tan solo en el sentido de querer explicar el porqué de las desigualdades de la riqueza, sino de las fuerzas emocionales: miedo ante la desgracia inesperada o al ansia de poder.(...)


Es una idea común de la antropología que la demonología moderna a menudo refleja un sentido similar, cuando una persona siente que todo lo que le da una identidad (es decir, su actividad, su vida, su coche...) puede ser fácilmente derrumbado. Hoy más que nunca, nos sentimos inseguros a ese respecto, aunque no sabemos contra qué demonios luchar. Ni siquiera si son reales.

Manel Loureiro escribió su primera novela, Apocalipsis Z, un thriller sobre No Muertos, en un blog en internet. Debido al gran éxito que alcanzó, fue publicado convirtiéndose automáticamente en un éxito de ventas, por delante de Stephen King. Él mismo explica su éxito:

"Los zombies suelen ponerse de moda en tiempos de crisis. Nos sentimos identificados con ese monstruo porque es lo que tememos nosotros de las crisis, el perder nuestra identidad" "También las historias de fantasmas, porque buscamos nuestros orígenes, en situaciones de crisis nos replanteamos quienes somos, de donde venimos, a donde vamos..."

¿Pero por qué ese miedo a perder nuestra identidad relacionado con la crisis económica, con la pérdida del dinero? 

Van Binsbergen hace una sugerente distinción entre la esclavitud y el trabajo asalariado. En la esclavitud, todo el ser de una persona está alienada, de modo que una persona se convierte en la propiedad de otro y deja de existir como sujeto legalmente autónomo. En el trabajo asalariado, sin embargo, sólo la parte de la vida de una persona que se vende como "trabajo" está alienado. La persona sólo le da una porción de su vida - es decir, de su ser - a cambio de un símbolo de esa porción.

Pero este símbolo, que es el dinero, luego alcanza un poder subjetivo, por lo que al final determina la vida de las personas cuya actividad representa. 
Una economía monetaria como es la nuestra, es aquella en la que las personas se rigen por una representación fetiche de sí mismos (el dinero). Las economías de mercado se rigen por este muerto fantasmal, (pero activo sobrenatural) poder llamado dinero.

También existen las ideas zombie: ideas políticas que fácilmente pueden ser destruidas por la evidencia, pero no obstante andan arrastrando los pies hacia adelante sin descanso, esencialmente porque se adaptan a una agenda política. Un buen ejemplo puede ser la frase "Para salir de pobre hay que trabajar más".

El antropólogo australiano Michael Taussig ha analizado el terror político por el que los hombres se hacen más vulnerables y maleables. 

En nuestra era, nadie se encuentra psicológicamente a salvo. La seguridad, en este sentido, se ha transformado en un bien preciado de cambio: se vende, se intercambia y compra seguridad como hace siglos atrás lo hacían con la felicidad." 

Es decir: "Te regalan miedo y te venden seguridad" Como afirma Gavin de Becker -el que fuera asesor de seguridad de la Casa Blanca- en su libro El valor del miedo, "infundir temores y dar seguridad ante ellos es lo más importante que ocurre en las relaciones humanas".

"El mundo jerárquico de antes de un temor que imponía autoridad, se ha convertido en una nueva sociedad en donde la tragedia constante prima sobre el orden. Así, el Estado-de-emergencia lleva continuamente a la guerra al desorden amenazante, y al Otro amenazante, enfatizando los prejuicios y las desigualdades entre los hombres. 

"El fascismo surge cuando la gente tiene miedo y se siente desamparada." dice Yayo Herrero, antropóloga y educadora.
Y para Taussig, es la guerra más muda de la historia:


“Por sobre todas las cosas, la guerra sucia es una guerra de silenciamiento. Oficialmente no hay guerra alguna. No hay prisioneros. No hay tortura. No hay desapariciones. Sólo el silencio que consume en gran parte el lenguaje del terror, intimidando a todos para que no se comente nada que pueda ser interpretado como una crítica a las Fuerzas Armadas… es la presencia de lo no dicho lo que logra el más simple de los comentarios de la esfera pública se vuelva asombroso en esta época de terror”




Fuentes:
http://jorgealbertoaguiar.blogspot.com.es/2007/01/el-estado-como-fetiche-el-fetichismo.html
http://jdeanicite.typepad.com/i_cite/2005/02/already_zombies.html
http://emc.eserver.org/1-4/hawkes.html
http://www.scribd.com/doc/74211707/Comaroff-and-Comaroff-Alien-Nation-Zombies-Immigrants-And-Millennial-Capitalism.
Nigel Barley, "Bailando sobre la tumba"
Edwin Ardener, "Witchcraft, Economics, and the Continuity of Belief" in Douglas (1970), 141-160, quotation from 154.
Wim van Binsbergen, "Witchcraft in modern Africa as virtualised boundary conditions of the kinship order."
Peter Geschiere, The Modernity of Witchcraft: Politics and the Occult in Postcolonial Africa trans.
A.R. Radcliffe-Brown, Prefacio a African Political Systems.
Philip Abrams, “Notes on the Difficulty of Studying the State.
http://digital.csic.es/bitstream/10261/8225/1/Jornades12_Marti%C3%8C%C2%81.pdf
http://www.psikeba.com.ar/articulos03/10-01/el-terror-en-michael-taussig-y-jean-baudrillard-del-estado-de-emergencia-al-no-evento.html

Friday, February 15, 2013

El gran árbol de la humanidad: los árboles y sus mitos.

"Quizás los saldu no estén bien enseñados por sus Ancianos. Quizás hayan olvidado las enseñanzas en su largo viaje por los desiertos" Ishi, el último yahi.

"Lo que la gente de la ciudad no entiende es que las raíces de todos los seres vivos están entrelazadas. Cuando un árbol majestuoso es derribado, cae una estrella del cielo." 
Chan´Kin Viejo, líder lacandón.





Son numerosos los mitos de todo el planeta que cuentan cómo, al principio del mundo, el Cielo y la Tierra se comunicaban entre sí a través de los árboles. Eran un nexo entre dioses y hombres, entre una vieja y una nueva era, una antigua y una nueva conciencia... Los árboles templo son conocidos en todas las tradiciones: Los santuarios del árbol del sintoísmo japonés, los árboles juraderos, de concejo o de junta de Europa Occidental, el árbol de la palabra africano, los árboles centrales o tótems americanos... el árbol como parlamento y lugar de reunión.
Desde este punto de vista, todos los humanos compartimos una cultura, cualquiera que sea nuestro origen, raza o sistema de creencias, el árbol parece haber sido un punto de acuerdo y encuentro natural.

"En la tribu naga, que habitaba en las selvas entre Birmania y la India, los árboles fueron testigos de un solemne trato entre los Dioses y los hombres, por el cual éstos se comprometían a preservar la armonía. Sin Embargo, un mal espíritu comenzó a murmurar y a extender el rumor de que los árboles crecían demasiado y que había que talarlos para que no robaran la luz.Cuado los hombres derribaron los árboles, terminó el tiempo de la armonía y sobrevino la desgracia."

Quizá en estos cuentos se encuentra el secreto de las raíces del futuro en un mundo en el que es preciso tomar conciencia de la importancia de los árboles y el bosque.

"Hachakyum fue el primer dios lacandón que bajó a la Tierra al principio del mundo. Lo primero que hizo fue el Cielo junto con las estrellas. La Tierra estaba obscura. Hizo las estrellas con arena y las sembró diciendo:
-"Las raíces de las estrellas que he sembrado son raíces del árbol. Todas las raíces de las estrellas son las raíces de los árboles. Los árboles están sembrados junto con ellas. Al caerse un árbol, en el Cielo se caerá una estrella." 
Y cuando terminó de hacer las estrellas, había claridad en la oscuridad."

 Puentes de Meghalaya, construídos con raíces de higuera. Ver fuentes.

IROKO, LA CEIBA.


"En el Principio reinaba un perfecto entendimiento entre la Tierra y el Cielo. Pero la Tierra un día comenzó a discutir con el Cielo y dijo que ella era más vieja y poderosa.  

"Yo soy la base de todo, sin mí el cielo se desmoronaría, porque no tendría ningún apoyo. Yo creé todas las cosas vivientes, las alimento y las mantengo. Soy la dueña de todo. Todo se origina en mí, y todo regresa a mí. Mi poder no conoce límites".

El rey Sol, Oba Olorun no respondió, pero hizo una señal al cielo para que se mostrara severo y amenazante. 

"Aprende tu lección", dijo el cielo mientras se alejaba. "Tu castigo será tan grande como tu arrogante orgullo".

Iroko, la ceiba, preocupada, comenzó a meditar en medio del gran silencio que siguió al alejamiento del cielo. Iroko tenía sus raíces hundidas en las entrañas de la tierra, mientras que sus ramas se extendían en lo profundo del cielo. Iroko comprendió que había desaparecido la armonía y que el mundo conocería la desgracia. Porque, hasta ese momento, el cielo había velado sobre la tierra para que el calor y el frío tuvieran efectos benévolos sobre las criaturas del mundo. La vida era feliz y la muerte venía sin dolor. Todo pertenecía a todos y nadie tenía que gobernar, conquistar, ni reclamar posiciones. Pero la enemistad del cielo lo cambió todo. No llovía y un sol implacable lo calcinaba todo. Llegó el tiempo de los sufrimientos y la fealdad apareció sobre la tierra.

Una noche, la angustia y el miedo hicieron su aparición. Luego llegaron todas las desgracias: toda la vegetación desapareció y sólo Iroko permaneció verde y saludable porque, desde tiempo inmemorial, había reverenciado al cielo. Iroko les daba instrucciones a aquéllos que podían penetrar al secreto que estaba en sus raíces. Entonces éstos reconocieron la magnitud de la ofensa y se humillaron y purificaron a los pies de la ceiba haciendo ruegos y sacrificios al cielo.

Muchos mensajeros fueron enviados a lo alto, pero ninguno pudo llegar a él. Sólo Ará-Kolé, el gran buitre americano, consiguió trasmitir las súplicas de los hombres a lo alto. El cielo se conmovió y grandes lluvias descendieron sobre la tierra. Lo que quedaba vivo en ella se salvó gracias al refugio que les ofreció Iroko. Luego volvió a reverdecer, aunque nunca regresaron los días felices del principio del mundo. El cielo ya no era enemigo, pero permaneció indiferente. Iroko salvó a la tierra y, si la vida no es más feliz, la culpa hay que echársela al orgullo.

EL CEDRO Y EL HIERRO.


Cuentan las leyendas judías que al tercer día Dios creó las plantas. En primer lugar fueron creados los cedros del Líbano, quienes, orgullosos de haber sido los primeros, se elevaron hacia lo alto considerándose superiores al resto de los vegetales.

Entonces dijo Dios:
Detesto la arrogancia y el orgullo, nadie más que yo debe ser exaltado.

Ya sabéis, al dios de los hebreos nunca le gustó que nadie le hiciera sombra y el mismo día creó el hierro, que habría de servir para derribar los árboles.

Los árboles lloraron amargamente y dijeron a su creador:
–Creímos que seríamos los seres más altos de la tierra y ahora, el hierro, nuestro destructor, ha sido llamado a la existencia.

A lo que Dios contestó:
–Proporcionaréis vosotros mismos el mango del hacha: sin vuestra ayuda, el hierro no será capaz de haceros daño.

Aún los árboles no sospechaban que faltaba muy poco para que fueran llamados a la existencia otros enemigos implacables: los animales y el hombre.

Esta historia, seguramente muy antigua, la resume un proverbio hindú según el cual “el hacha pidió madera al bosque para su mango y el bosque se la dio”.

LOS PALITOS DEL CASTAÑO DE INDIAS.


Cuando los Dioses y los Héroes se hubieron transformado en criaturas del aire, del agua y del monte, Jupka y Kaltsuna se situaron en la cima del Waganupa, viendo el mundo creado a sus pies. ‘Está acabado.’ Así habló Jupka. Y así Kaltsuna: "Es el momento de que hagas la Gente".
Jupka se sentó a los pies del Waganupa, donde cortó palitos rectos de castaño de Indias. Colocó un palito en el suelo, en dirección este-oeste; le echó un poco de humo de su pipa de piedra; y dijo al palito: 

-‘¡Tú eres un Yahi! Tú eres un hombre, hisi, el primer hombre del Pueblo".

Luego Jupka colocó un palito corto en el suelo, le echó un poco de humo y dijo como antes: 

-‘¡Tú eres un Yahi! Tú eres una mirimi, una mujer, la primera Yahi del Pueblo’

Jupka cortó más y más palitos de castaño de Indias. No levantó la vista de su trabajo hasta que el Sol estuvo bajo en el Oeste. Para entonces, había personas en el cañón y en las praderas y en las colinas y a lo largo de las corrientes de agua.

Esta historia la cuenta Ishi, el último indio Yahi. Y entre otras cosas, también dijo:

“Los Dioses de los Saldu (hombres blancos) están más allá de la comprensión de un Yahi. Dieron a su Pueblo ruedas, fuego-rápido y hierro y acero, fuertes para hacer herramientas; les dieron muchas, muchas cosas buenas... Pero, a mí me parece, no se preocuparon demasiado de que su Pueblo fuera sabio. Al parecer no establecieron un Camino —un Camino claro— para que lo siguieran los Saldu."

LA HIGUERA DE BUDA.


El árbol Bodhi fue la ficus religiosa. Según los textos budistas, Sakhiamuni Gautamá se sentó debajo de este árbol durante semanas. Como empezó una terrible tormenta, de debajo de las raíces del árbol surgió Muchilinda, el rey de los nagas (serpientes), se enroscó alrededor de Gautamá y lo cubrió con su caperuza. Gautamá finalmente alcanzó la iluminación espiritual y se convirtió en Buda (el iluminado) y originó el budismo.

"Cruzó el río y, por fin, encontró una enorme higuera. Se sentó a la sombra del follaje, cruzo las piernas y adopto la posición del loto.
Prometió: “Permaneceré en esta posición hasta que haya logrado la verdadera iluminación, aunque el calor marchite mi cuerpo mientras lo intento.” Y cerró suavemente los ojos, devorando lentamente el recuerdo del mundo exterior e interiorizándolo, penetrando en la última etapa de su viaje de búsqueda.
Entonces, se disiparon todos los temores y las dudas que había existido en las profundidades de su ser, como un pesado lastre, desde el nacimiento. Finalmente, había llegado a las hondas e inconmovibles raíces de su propia existencia."

Buda, lleno de gratitud hacia el árbol, después de la iluminación, se quedó ante el árbol con los ojos abiertos sin parpadear durante una semana entera.  


EL EUCALIPTO DE PURUKUPALI.


Cuenta una leyenda australiana que, en la remota Era del Sueño, la tribu que habitaba en la isla de Melville, en el norte, perdió su jefe, Purukupali. Después de su entierro, se organizó un gran desafío: el que fuera capaz de arrojar más lejos su lanza sería el nuevo jefe. Aquel día, todas las lanzas que se hincaron en el suelo enraizaron convirtiéndose en los primeros eucaliptos. Las de Pipinyawari, que volaron más lejos que las demás, fueron los eucaliptos mayores. Pero Pipinyawari había hecho tal esfuerzo que las vértebras salieron de su espalda. Entonces, incapaz de asumir su papel de nuevo jefe, se tiró al agua y se convirtió en un queenfish, pez que se caracteriza por sus grandes aletas dorsales.

EL FRESNO YGGDRASSIL.


El fresno Yggdrassil es el árbol que según los Eddas (textos sobre la mitología nórdica), contiene y sostiene el universo. "El más grande y hermoso de todos los árboles" Sus ramas se extienden por todos los mundos y se elevan por encima del cielo. En lo más alto está el águila y, en lo más bajo, el monstruo Nidhögg que muerde la punta de la raíz. La ardilla Ratatosk sube y baja por el tronco trayendo y llevando rumores, mientras cuatro ciervos se alimentan de su follaje. Bajo sus tres raíces se encuentran Asgard, Jotunheim y Niflheim. En la base de Yggdrasil hay tres pozos: el Pozo de la Sabiduría, guardado por el gigante Mimir (Mímisbrunnr); Hvergelmir, donde nacen muchos ríos;  y el Pozo del Destino (Urdarbrunnr) también conocido como el Pozo de Urd, guardado por las Nornas, diosas del destino. Urd es la más vieja, la encargada de tejer el hilo de las vidas humanas. Werdandi entrelaza y une las dos hebras de los enamorados.Skult corta el hilo cuando llega la hora de la muerte.
"Yo sé que existe un freno llamado Yggdrassi, la copa del árbol está bañada por blancos vapores de agua, de gotas de rocío que caen al valle. Se alza eternamente verde sobre la fuente de Urd. Es el gigante Dios de la fecundidad."

EL BAOBAB, EL ÁRBOL DEL REVÉS.


Son muchos los mitos que explican el aspecto achaparrado del baobab, el árbol de la vida en la tradición africana, del que se dice que sus ramas son raíces que arraigan en el Cielo, ya que durante nueve meses al año permanece desnudo. 

Según la historia masai, el baobab fue el primer árbol creado y como estaba solo y se aburría, empezó a caminar sobre la tierra, por lo que Dios lo castigó volviéndolo a plantar boca abajo. Otro señala que en los primeros días del mundo los dioses repartieron semillas entre todos los animales para que las plantaran; las del baobab se la dieron a la hiena, ésta un poco torpe, y enojada por haberlas recibido en último lugar, decidió plantarlas al revés. Hay otra leyenda, en Kenya, cerca de Kilimanjaro: Cuando Dios hizo el mundo puso al baobab muy cerca del agua, de modo que se veía continuamente en el reflejo y veía a los otros árboles y todos ellos le parecían más hermosos, ya que sus flores son más pequeñas y menos vistosas y su corteza arrugada parecía la de la piel de un elefante, arrugada... El baobab empezó a quejarse. Entonces Dios, cansado, arrancó el árbol y lo volvió a plantar al revés. Desde entonces, el baobab ya no puede verse, ha dejado de quejarse y todo está de nuevo en orden.


EL MELOCOTONERO CHINO.


Una leyenda afirma que la Reina Madre del Oeste, una de las deidades más poderosas desde la dinastía Han, tenía un jardín donde los melocotones de la inmortalidad fructificaban una vez cada 3.000 años, y el que comiera de los mismos alcanzaría la inmortalidad. Entonces la reina organiza un maravilloso banquete, el Panto Hui, o "El festival de los melocotones", al que invita a los dioses y a los ocho inmortales venerados por el taoísmo, que se alimentan tan sólo de los frutos y las flores de este árbol. Por eso, el melocotón en China es símbolo de longevidad.


 

EL SICOMORO DE LOS SARCÓFAGOS.


Entre los antiguos egipcios se veneraba el sicomoro, la higuera africana. Se pensaba que estos árboles eran enacarnación de la diosa del cielo Hathor. Los campesinos les dejaban ofrendas de alimentos y jarras de agua para que los fieles y viajeros pudieran beber y regar el árbol. Es al sicomoro al que encuentran las almas difuntas en el Más Allá, que adoptan la forma de un pájaro y se posa en sus ramas, en el que Hathos les recibe y les ofrece los higos y el agua de la vida eterna. Por eso, este árbol facilitaba el tránsito y se usaba también para hacer sarcófagos. Además, son dos sicomoros gigantes los guardianes de la entrada del dios Ra que sale todas las mañanas.

EL BANIANO DE QAT.

El baniano de Melanesia es como una catedral. Los creyentes se congregan en su sombra con la seguridad de que allí se haya su dios o un espíritu divinizado, y que entonces ellos lo oirán, o lo verán, o lo soñarán. Para ello, se utiliza un culto con comunión incluida, bebiendo una nuez de coco llena de kava, un jugo narcótico con la que los nativos se comunican con el poder. Y es que este árbol también es nexo de unión entre el Cielo y la Tierra. Cuenta la leyenda que el dios Qat, el dios civilizador que organiza la vida y la muerte, robó a una mujer sus alas mientras se bañaba, para casarse con ella. Lo malo era que esta mujer, todo lo que tocaba, lo maduraba: los ñames, los bananos... La madre de Qat le regañó, y ella lloró hasta que sus lágrimas hicieron un gran agujero en la tierra, donde encontró sus alas escondidas. Se las puso para escapar, pero Qat trepó por un banano para raptarla y, cuando ya estaban bajando por el tronco, alguien abajo cortó la raíz de aquel banano, por lo que Qat murió estrellado y la mujer alada pudo escapar de nuevo.

LOS HOMBRES DE LA TIERRA MEDIA.


El dios Odín (llamado “padre de todas las cosas”) y sus hermanos Vili y Vé, dieron muerte al gigante Ymir.
El cuerpo de Ymir fue arrojado al Abismo, y de su carne se creó la Tierra. Su sangre formó los Ríos y los Mares, y de sus huesos y dientes nacieron las Montañas. Su cráneo fue colocado sobre la Tierra y formó el Cielo, eternamente sujeto por cuatro enanos: Norte, Sur, Este y Oeste.
Un día, paseando los dioses por la playa nacida del mar, encontraron dos troncos de árbol: un fresno y un olmo. De ellos tallaron al primer hombre y a la primera mujer. Odín les concedió la vida y el alma; Vili, la capacidad de pensar y de sentir; y Ve les concedió figura, habla, oído y vista. Fueron llamados Fresno –el hombre, y Olmo –la mujer.
Fresno y Olmo tuvieron hijos y crearon así la raza humana, a la que le fue concedido el derecho de habitar el territorio de Midgard, también llamado la Tierra Media.



"Jamás es una palabra demasiado larga hasta para mi. Mientras perduren vuestros reinos, querrás decir; y mucho tendrán que perdurar por cierto para que les parezcan largos a los Ents" Árbol Ent. J.R.R. Tolkien, "El señor de los anillos"



Fuentes:

Cada año, los suaves ríos de Meghalaya cambian a ser torrentes, casi imposibles de cruzar. Para cruzarlos, se valen de puentes construídos con las raíces de la higuera. Para que se mantengan, tienen que revisarlas generación tras generación. Ojalá nunca pierdan sus raíces. http://youtu.be/KLDZHhHnJS4
El gran árbol de la humanidad. Ignacio Abella
La magia de los árboles. Ignacio Abella.
http://www.docstoc.com/docs/39980430/Cuentos-del-Pacifico